Claves del conflicto diplomático entre Ecuador y México

Getting your Trinity Audio player ready...

En un hecho que ha sorprendido a tirios y troyanos por su brutalidad, torpeza y desprecio por el derecho diplomático, el gobierno del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ordenó a sus cuerpos de seguridad que penetraran por la fuerza el viernes 5 de abril en horas de la noche en la sede diplomática de México en Quito para apresar al exvicepresidente Jorge Glas, a quien las autoridades aztecas habían concedido asilo político y posteriormente asilo diplomático a tenor de lo establecido por las Convenciones Americanas que rigen estos asuntos (La Habana de 1928, Montevideo de 1933 y Caracas de 1954).

El gobierno mexicano se basó en el principio establecido desde 1928 por la Convención de La Habana sobre asilo político, que reza así: «La calificación de la delincuencia política corresponde al Estado que presta el asilo». Como se nos ha enseñado en cualquier curso sobre Derecho de Tratados que se imparta en cualquier centro de educación superior en las Américas, esta es una institución de larga data refrendada por el Derecho Internacional Americano que, además, se ha consolidado a través de numerosos casos precedentes, entre otros el del dirigente político peruano, Víctor Raúl Haya de la Torre, que opuso a los gobiernos de Colombia —que otorgó el asilo— y de Perú —que lo cuestionó—.

En su momento, ambos gobiernos dirimieron el litigio jurídico apelando a la Corte Internacional de Justicia en 1948-1950, que dejó establecido que Colombia podía otorgar el asilo político —y por ende diplomático— al Señor Haya de la Torre, lo cual no obligaba a Perú a emitir el salvoconducto necesario para que este viajara a Bogotá.[1]

La acción del Ecuador, además, infringe de manera flagrante la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961 que establece taxativamente que las sedes diplomáticas son inviolables. Para colmo, hubo claras evidencias, por imágenes de video, que agentes de la policía ecuatoriana agredieron, sometieron y tiraron al piso a un funcionario diplomático mexicano, el jefe de la Cancillería de la Embajada, Roberto Canceco.

Sin duda, se trata de hechos aparentemente irreflexivos pero violentos, que pueden convertirse en precedentes muy dañinos para el desarrollo de las relaciones diplomáticas entre países de América Latina y el Caribe.

Quizás convenga recapitular los argumentos de ambas partes para tener mayor claridad sobre lo sucedido.

intervención policial embajada de México en Ecuador
Claves del conflicto diplomático entre Ecuador y México 4

La evasiva del Ecuador

Para excusar semejante desatino, el gobierno ecuatoriano, a través de su canciller, Gabriela Sommerfeld, ha alegado que México había actuado de manera impropia al concederle primero asilo político y después asilo diplomático al Señor Glas, sobre quien pesaba una acusación de corrupción y una orden de captura por parte de un tribunal ecuatoriano competente, razón por la cual Ecuador no le reconocía sus derechos de asilo diplomático y político.

El exvicepresidente, al pedir asilo en la Embajada de México el 17 de diciembre pasado, alegó que temía por su vida y su libertad al entender que estaba siendo perseguido por sus antecedentes políticos. El gobierno mexicano actuó de acuerdo con los precedentes bien conocidos y comunicó al ecuatoriano que le había dado al Señor Glas la categoría de «huésped» de su Misión Diplomática hasta que tomara la decisión de darle o no asilo político, después de estudiados los descargos de las autoridades ecuatorianas. Con ello se ajustó a la costumbre existente dentro del derecho diplomático y de tratados de la región latinoamericana y caribeña.

La posición ecuatoriana, que resultó justificativa ex post facto, ignoró que desde esa misma fecha ambos gobiernos estuvieron negociando cómo darle solución a este conflicto y que el gobierno mexicano, apoyándose en las Convenciones antes mencionadas y en los precedentes establecidos, insistió en su derecho de decidir si otorgaba asilo a Glas dependiendo de las informaciones que le suministraran las autoridades ecuatorianas y otros gobiernos de la región.

Ecuador podía seguir haciendo gestiones y negarse a otorgar el salvoconducto necesario para que el exvicepresidente pasara de ser un asilado diplomático a un asilado territorial o político en suelo mexicano. O sea, al negar el salvoconducto solicitado por México, Glas quedaría en una suerte de arresto domiciliario como estuvo Víctor Raúl Haya de la Torre 5 años en la Misión de Colombia en Lima entre 1948 y 1953, el Cardenal húngaro Midzenty en la representación diplomática norteamericana en Budapest durante 15 años entre 1956 y 1971, o Julian Assange durante 7 años en la Embajada ecuatoriana en Londres.

Ecuador podía seguir haciendo gestiones y negarse a otorgar el salvoconducto necesario para que el exvicepresidente pasara de ser un asilado diplomático a un asilado territorial.

Sin embargo, el gobierno ecuatoriano no dio ninguna señal de que estaba en disposición de negociar una salida diplomática a la situación, insistiendo autoritariamente en su posición de que México debía entregar Jorge Glas, cosa a la que las autoridades aztecas, como era obvio, no accederían.

Jorge Glass sacado por la fuerza de la embajada de México
Jorge Glass sacado por la fuerza de la embajada de México / Foto: RFI

Hay que tener en cuenta que México es un país con una sólida tradición de ofrecer asilo político a ciudadanos latinoamericanos perseguidos en sus países y que su cuerpo diplomático tiene una larga experiencia y una profunda experticia jurídica en el manejo de estos temas. Eso lo tenían que saber el presidente Noboa y su canciller.

Es difícil creer la excusa de que actuaron como lo hicieron debido al peligro de fuga inminente, como afirmó la ministra Sommerfeld el día 6. La embajadora mexicana en Lima, Raquel Segur, ha subrayado la ridiculez de esta excusa.

Al momento de escribir este texto ha surgido la noticia de que el gobierno de Ecuador ha solicitado una reunión urgente del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para presentar su posición bajo el rótulo de «Normas de las relaciones diplomáticas y de asilo».

La posición mexicana

Lo que desencadenó la decisión mexicana de otorgar el asilo político a Jorge Glas, con lo que este dejó de ser «huésped» de la Embajada para convertirse en asilado diplomático, fue esta insistencia de Ecuador en que se debía entregar al refugiado y la insistente demanda de que se permitiera a sus fuerzas policiales penetrar en el recinto diplomático para detenerlo, una solicitud totalmente inaceptable si nos atenemos a las costumbres habituales.

jorge glass embajadajpg
Jorge Glass refugiado en la embajada de Mexico / Foto: DW

Ante unas declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, que el gobierno ecuatoriano consideró eran una intromisión en sus asuntos internos, las autoridades de Quito tomaron la medida extraordinaria de declarar «persona non grata» a la embajadora Segur.

El gobierno mexicano no se precipitó. Ateniéndose a la presunción de que el asunto podía ser resuelto por vía diplomática, envió varios enviados especiales a Quito. Sin embargo, la decisión de Ecuador de declarar «persona non grata» a la embajadora azteca puso al presidente López Obrador en una situación inadmisible, por lo que decidió otorgar el asilo solicitado y declarar al señor Glas asilado diplomático.

la decisión de Ecuador de declarar «persona non grata» a la embajadora azteca puso al presidente López Obrador en una situación inadmisible.

Dada la tradicional posición mexicana en materia de asilo y la experticia de su cuerpo diplomático en el tema es difícil pensar que pudiera dar un paso en falso. La canciller mexicana Embajadora Alicia Bárcena ha sido muy clara en argumentar que la posición de su país se basó en las tres convenciones mencionadas y en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961.

Además de la inevitable ruptura de relaciones diplomáticas adoptada por el gobierno de México ante tamaño quebrantamiento de la integridad de su Misión en Quito, la canciller Bárcena ha denunciado la acción ecuatoriana como una «flagrante y grave violación» de principios diplomáticos básicos y ha anunciado que su gobierno presentará una demanda ante la Corte Internacional de Justicia.

Reacción internacional

La reacción internacional ha sido prácticamente unánime en su condena a Ecuador.

Una de las opiniones jurídicas más autorizadas ha sido la del prestigioso abogado peruano Diego García Sayán, quien ha sido ministro de Justicia (2000-2001) y canciller (2001-2002) de su país, presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (2010-2014) y más recientemente (desde el 2016) relator especial del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas sobre la independencia de magistrados y abogados.

Para García Sayán, «la irrupción con fuerzas uniformadas en una sede diplomática es un acto escandalosamente contrario al derecho internacional».

Y, en declaraciones recogidas en entrevista con BBC Mundo, añadió:

«Esto que ha ocurrido ahora es doblemente inaceptable. Primero porque la irrupción viola las normas del derecho internacional de espacio diplomático, que no es territorio extranjero pero hay que respetar como tal. Segundo, se está afectando una obligación que es de origen latinoamericano: el respeto al derecho de asilo diplomático. Eso viene de la convención de Caracas, que tiene ya décadas (1954)».

Diego García Sayán

Los pronunciamientos de personalidades representativas de organismos e instituciones internacionales no se han hecho esperar[2]:

Después de expresar su alarma por lo sucedido en Quito, el secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, en un comunicado oficial, reafirmó «el principio cardinal de la inviolabilidad de los locales y del personal diplomático y consular», y subrayó que ese principio debe ser respetado en todos los casos, de conformidad con el derecho internacional. Además, señaló que las violaciones de este principio «ponen en peligro la prosecución de unas relaciones internacionales normales, que son fundamentales para el avance de la cooperación entre los Estados».

La Secretaría General de la OEA, declaró en un comunicado que «rechaza cualquier acción violatoria o que ponga en riesgo la inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas y reitera la obligación que tienen todos los Estados de no invocar normas de derecho interno para justificar el incumplimiento de sus obligaciones internacionales».

Por su parte, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, se apresuró a publicar en X (Twitter) su repudio a la acción ecuatoriana: «El asalto a la Embajada de México por parte del Gobierno de Ecuador, con el objetivo de secuestrar al ex vicepresidente J. Glass, constituye un acto intolerable para la comunidad internacional, dado que ignora el histórico y fundamental derecho al asilo. Repudiamos enérgicamente esta violación a la soberanía del Estado mexicano y al derecho internacional. Nos solidarizamos con el pueblo mexicano y su presidente, @lopezobrador_»

Asimismo, en su calidad de presidente de la CELAC ha convocado una reunión urgente de la troika que la preside para eventualmente realizar una plenaria de cancilleres. Ello subraya la gravedad del hecho.

Los jefes de Estado de la región han sido unánimes en su repudio, desde el presidente Nicolás Maduro hasta el mandatario Javier Milei, como reportó en un despacho la agencia de prensa France 24, en el cual calificó el hecho de «cataclismo diplomático».

Vale la pena reproducir tres reacciones más procedentes de gobiernos e instituciones fuera de la región.

La Embajada británica en Quito se pronunció de la siguiente manera el 7 de abril: «El gobierno del Reino Unido condena las acciones tomadas por las autoridades ecuatorianas en la Embajada mexicana en Quito el 5 de abril. Todos los gobiernos deben respetar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas, según se ha establecido por la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961. La protección y seguridad de los locales diplomáticos y de su personal es un principio fundamental que guía las relaciones diplomáticas».

El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, se pronunció así: «Estados Unidos condena cualquier violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y se toma muy en serio las obligaciones de los países bajo la ley internacional de respetar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas. México y Ecuador son socios cruciales de Estados Unidos y ponemos un alto valor a nuestras relaciones con ambos países. Urgimos a las dos naciones a resolver sus diferencias de acuerdo con las normas internacionales».

Finalmente, vale subrayar lo dicho por Josep Borrell, Alto Representante de la Unión Europea para la política exterior y de seguridad común, en su cuenta de X (Twitter): «Condeno la violación de las instalaciones de la Embajada de México en Quito en un claro incumplimiento de la Convención de Viena de 1961. Hago una llamada a respetar el derecho internacional diplomático».

La posición de Cuba

Como era lógico esperar, las autoridades cubanas se pronunciaron de manera inmediata en solidaridad con el gobierno de México y en defensa del derecho internacional. El propio presidente Miguel Díaz Canel en su cuenta de X (Twitter) emitió un mensaje en el que se dice: «Toda nuestra solidaridad con #México, ante la inaceptable violación de su Embajada en Quito. Debe respetarse por todos la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas que es un componente esencial del Derecho Internacional».

Según agradeció la canciller de México, Alicia Bárcena, el embajador cubano en Quito se unió a los jefes de misión de otros tres países (Alemania, Honduras y Panamá) que escoltaron al personal de la Embajada mexicana en su viaje al aeropuerto internacional Mariscal Sucre de la capital ecuatoriana, cuando se vieron obligados a abandonar el país después de la ruptura de relaciones.

La posición cubana obedece no solo a los lazos de amistad que existen entre los gobiernos de Díaz Canel y López Obrador, sino también a una tradicional defensa y práctica del ejercicio del derecho de asilo político como institución del derecho internacional americano.

La posición cubana obedece también a una tradicional defensa y práctica del ejercicio del derecho de asilo político.

Esa tradición viene desde los gobiernos democráticos que tuvo Cuba antes de la dictadura de Batista. No fue por casualidad que la primera convención sobre asilo político en el continente americano se firmara en La Habana en 1928. Durante los gobiernos de Ramón Grau San Martín y Carlos Prío Socarrás, perseguidos políticos de las dictaduras en el área del Caribe (República Dominicana, Haití, Venezuela, Colombia, y Nicaragua) se refugiaron en Cuba.

Por otra parte, la sociedad cubana fue testigo del espantoso crimen cometido por la dictadura de Batista cuando el 29 de octubre de 1956 fuerzas al mando del jefe de la Policía, coronel Salas Cañizares, penetraron en la Embajada de Haití y asesinaron a mansalva a diez jóvenes revolucionarios asilados en ella. El hecho le costó la vida a Salas, pues uno de los jóvenes alcanzó a dispararle al bajo vientre cuando el jefe policial se le acercó para rematarlo.

Ya después del triunfo de la Revolución, el gobierno continuó otorgando asilo a refugiados progresistas de izquierda. Fue notoria la presencia de los procedentes de las dictaduras del Cono Sur (chilenos, uruguayos, argentinos, brasileños, bolivianos) durante los terribles años de la Operación Cóndor. La tradición cubana de asilo se extendió a perseguidos políticos colombianos y centroamericanos en fechas más recientes.

Fueron notorios dos casos que tuvieron que ver con peticiones de gobiernos de países desarrollados que solicitaron la cooperación cubana para darle salida a militantes de grupos contestarios nacionalistas en procesos de negociación, que facilitaron la liberación de rehenes: a petición del gobierno español de Felipe González se aceptó dar asilo político a militantes vascos; y a instancias del gobierno canadiense de Pierre-Eliot Trudeau se dio asilo a un grupo limitado de miembros del Frente de Liberación de Quebec.

No se pueden confundir casos de penetración forzada y violenta en misiones diplomáticas acreditadas en La Habana por parte de ciudadanos que ambicionaron emigrar, como sucedió en la Embajada del Perú en 1980 o en la Embajada de Ecuador en 1981, entre otros, con una solicitud de asilo político o asilo diplomático.

No se pueden confundir casos de penetración forzada y violenta en misiones diplomáticas acreditadas en La Habana por parte de ciudadanos que ambicionaron emigrar.

Estos casos se han dado no solo en Cuba sino en otros países. Se ha pretendido comparar la acción inexplicable del gobierno ecuatoriano en este caso con la tomada por fuerzas de la seguridad cubana, previa autorización expresa del jefe de misión, en la Embajada de Ecuador en 1981. La explicación precisa que diera el profesor Arturo López Levy en un artículo previo en esta plataforma me exime de abundar sobre el tema.

Consecuencias

No puede caber duda alguna de las graves consecuencias que puede tener este hecho en el contexto de las relaciones interamericanas e internacionales en general. No hay forma de que la comunidad internacional pueda dejar pasar la acción ecuatoriana, que se ha caracterizado por su irresponsabilidad.

Las instituciones convocadas (Corte Internacional de Justicia, Organización de las Naciones Unidas, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) tendrán que tomar medidas para que no se cree una imagen de impunidad que fomente acciones futuras contra representaciones diplomáticas donde quiera que funcionen. Ecuador tendrá que sufrir las consecuencias de la acción imprudente y arbitraria de su gobierno.

Se ha argumentado que el gobierno del presidente Noboa podría derivar algún beneficio doméstico de esta acción en que se presenta como duro ante el delito de corrupción, especialmente porque está abocado a presentarse a elecciones en febrero del 2025. Pero esto es discutible. Ecuador vive una crisis de seguridad que le ha servido al mandatario para decretar el estado de sitio y perseguir a sus opositores. El gobierno también se ha visto envuelto en varios escándalos. Muchos observadores afirman que no hay mejoras notables de una situación que se deterioró sustancialmente a principios de año.

Ecuador vive una crisis de seguridad que le ha servido al mandatario para decretar el estado de sitio y perseguir a sus opositores.

Finalmente, algunos dirigentes políticos han calificado la acción de secuestro y han llamado la atención al hecho de que el exvicepresidente Glas ha sido incomunicado. Una información de última hora es que algunos parlamentarios han propuesto que la canciller y la ministra del Interior sean sometidas a juicio político por su papel en este nefasto incidente que afectará el status internacional del gobierno de Noboa.

Lo sucedido con el exvicepresidente después de haber sido extraído por la fuerza de la Embajada mexicana, confirma que sus aprensiones iniciales no eran injustificadas. Ha sido incomunicado y sus abogados afirman que se encuentra en un estado de indefensión con incluso peligro de muerte. La prensa ecuatoriana se ha quejado de la falta de transparencia del gobierno después de esa operación de fuerza.

***

Una vez más el destino ha colocado a México en una disyuntiva histórica, la de defender al derecho internacional y diplomático latinoamericano y caribeño y, para la satisfacción de todos sus amigos, el gobierno del presidente López Obrador está demostrando su compromiso indeclinable con el viejo axioma de Benito Juárez: Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz.


[1] Conviene acotar la diferencia entre uno y otro. «Asilo político» es el que puede otorgar cualquier estado a un ciudadano de otro estado que reclame ser perseguido por sus ideas políticas. Es un derecho que se ejerce en el territorio del estado anfitrión. No todos los estados reconocen la existencia de esta institución. Estados Unidos, por ejemplo, no reconoce el así llamado «asilo» político y utiliza en su lugar el concepto de «refugiado». El «asilo diplomático» es similar al «político» pero con la peculiaridad de que se ejerce en tanto el beneficiario de la categoría de «asilado» se aloja en la representación diplomática del estado que le ha otorgado el asilo en el estado del cuál es ciudadano. No siempre una supone la otra. Cualquier ciudadano puede solicitar el asilo político cuando ya se encuentra en el territorio del estado ante el cual lo solicita. Pero si lo hace en el territorio del estado del cual es ciudadano, entonces puede apelar a que se le otorgue la categoría de «asilado diplomático».

[2] Sólo se recoge un número limitado de las mismas.

11 COMENTARIOS

  1. AL AUTOR:
    También es ley universal “rechazar a solicitantes de asilo que tienen causas criminales pendientes o condenas en firme de delitos comunes”, ( Artículo 3, Convención de Caracas ) como las dos condenas que tiene el ex-VP de Ecuador. Una de ellas muy grave, por aceptar sobornos de la multinacional brasileña ODEBRECHT. Dos condenas en firme y huido, para hacer mas injustificada la concesión de asilo.

    Ud ha escrito algún articulo sobre la violacion de la Embajada de Ecuador en La Habana en Febrero de 1981 por parte de Tropas Especiales del MININT para extraer a una familia que había entrado a la sede pidiendo asilo ? Esto no es una violacion de tratados internacionales ? En ese momento, me dicen mis fuentes, Ud era Cónsul de Cuba en Montreal, Canada. Si esta información es errónea, corríjame, por favor.

    Ahora voy con todo contra el presidente de Mexico, Andres Manuel, que ha buscado conflictos diplomáticos con Peru, Argentina, Uruguay, Colombia y ahora Ecuador. Es un agitador extremista y populista de la izquierda mas recalcitrante del Hemisferio Occidental.
    AMLO detesta las instituciones de prestigio establecidas que velan en el mundo por el respeto a los DD>HH, entre ellas Amnistía Internacional, Americas Watch y la Comisión Mexicana de DD>HH.
    Demoniza a diario a la prensa libre e independiente que no esta en el eje de la extrema izquierda. Crítica con dureza a los medios mexicanos no alineados con su política populista de extrema izquierda, pero calla ante los excesos del periódico cubano Granma.
    Su estrategia es la polarización, el choque frontal con todo aquel que no este alineado con su línea política o lo haya criticado previamente.
    Las conferencias de prensa diarias, conocida por LAS MAÑANERAS < es la tribuna para el insulto, la descalificación, la critica con tintes politicos y otros sin base ni fundamento. Dicha conferencia diaria, es una fuente de tension con los periodistas asistentes.
    Y por ultimo, cientos de empleados federales de Mexico han sido despedidos por criticar la política del gobierno en los últimos 6 anos, o sea, durante el mandato de AMLO.

    Por suerte, Andres Manuel se ira pronto a casa, por lo que respiraremos aliviados. SE MARCHA EL AGITADOR.

    • José: Lo que sí no tiene ninguna discusión es que las fuerzas de seguridad ecuatorianas violaron un artículo muy claro de la Convención de Viena que prohibe violar el territorio de una Embajada. Sólo se exceptúa el caso en que se pida permiso y los diplomáticos residentes lo den. Lo otro que no tiene ninguna discusión es que el país que da el asilo tiene la facultad de darlo después de escuchado lo que diga el país anfitrión. Los precedentes están ahí. Pero fíjese, las fuerzas policiales ecuatorianas entraron no sólo sin permiso sino sin advertencia previa, «con premeditación y alevosía», según reza el dicho. Pero en todo caso, ¿Por qué Ecuador no llevó el caso ante la OEA ANTES de invadir la Embajada? ¿Por qué los policías golpearon al personal diplomático mexicano? Yo he estado en circunstancias como ésa y le he dicho personalmente a las fuerzas de seguridad que no puede entrar en una Embajada y ninguna han ignorado esa advertencia. En el caso de Cuba, a las personas que usted hace referencia nunca el gobierno de Ecuador les dio asilo ni las invitó. Esas personas entraron por la fuerza en la Embajada de Ecuador en La Habana y el jefe de misión ecuatoriano pidió que los desalojaran. Después su gobierno lo desautorizó. Sobre mis funciones, no tiene que apelar a ninguna fuente como si fuera algo ilegal u oculto. Sí, yo fui diplomático cubano durante 35 años (1961-1996) y Cónsul General en Monreal entre 1977 y 1980. Pero también fui Primer Secretario en Argentina en 1973-1977 y tuve a mi cargo la protección de la Embajada la noche del golpe militar de 1976. Los gendarmes argentinos que rodearon la Embajada esa noche intentaron entrar y yo les dije que no podían entrar armados y que no podía pasar de los locales de atención al público y a pesar de ser una dictadura brutal, se estuvieron muy tranquilos. Usted puede tener la opinión que quiera sobre López Obrador pero sigue siendo el presidente de México. Y el presidente de Ecuador, señor Noboa, hizo caso omiso de la Convención de Viena y de las Convenciones sobre Asilo y ordenó entrar por la fuerza a las tropas de seguridad. Eso es una violación del derecho internacional, del derecho diplomático y del derecho de asilo. En Ecuador hay personas mucho más peligrosas y más delincuentes de Jorge Glas, quien, además, es un hombre enfermo y sí es un perseguido político aunque Usted no lo quiera admitir. Tenga un buen día.

    • Lo sucedido en la Emb. de Ecuador en la Habana en 1981fue a solicitud del gobierno de Ecuador pues los personajes que irrumpieron a punta de pistola no eran perseguidos políticos ni nadie los conocía de ninguna filiación
      Mantenían encañonado al embajador un señor mayor acostado en un sofá desde hacía 3 días
      Se comportaron como viles delincuentes
      En el juicio estuvo presente el embajador citado con un abogado y no estuvieron ni las mujeres ni niños
      Guardese sus mentiras señor derrotado
      La Revolución no necesita de métodos terroristas para lograr respeto

  2. Cada vez que hay un politico de izquierda o ultraizquierda involucrado en delitos comunes, “el Eje Bolivariano” entra en tromba a defender lo indefendible: a desafiar el estado de derecho, tribunales incluidos, en el país donde ha sido arrestado o condenado el politico. No recuerdan a Dilma, la expresidenta de Brasil depuesta por su parlamento ? En Peru ha sucedido lo mismo con el expresidente Pedro Castillo, al que AMLO cree ciegamente en su inocencia”.
    Y por que ahora no entran en tromba a defender al Tarek El Aissami, en Venezuela ? Porque todo lo que dicte Nicolas Maduro “es ley y va a misa”.

    • Señor Lao, ¿en serio usted cree que en Ecuador hay ahora un estado de derecho y que el señor Glas es un delincuente al que hay que arrastrar? Lo de Dilma Roussef fue una injusticia y una maniobra. Y Usted lo sabe.

  3. alzugaray se le olvida la crisis de las embajadas en 1990 .el respeto a los acuerdos tomados por la cancilleria cubana e italiana .donde Cuba acordo darme un salvoconducto para salir del pais .el cual violo y se convirtio en una persecucion contra mi persona terminando en el COMBINAD DEL ESTE con un un delito de desacato ala figura del maximo lider .gritar abajo fidel.

  4. Carlos Berenguer, Ingeniero cubano asilado en la Embajada de Peru , en Abril de 1980, narra en su libro que a pesar de haber recibido un salvoconducto para salir de la embajada y regresar de forma segura a su casa, fue hostigado y detenido, pero ademas, impedido de salir del pais por orden del Comandante. Pasados los anos, sin trabajo ni medios para subsistir, su madre, que fue combatiente del 26 de Julio, se encontro a Vilma Espin en un velorio, la cual conocia de la etapa pre-revolucionaria y le pidio que intercediera ante Fidel para que su hijo pudiera salir a EE>UU a encontrarse con su esposa e hijo, que si habian logrado salir de Cuba. La gestion de Vilma Espin dio frutos y Carlos Berenguer por fin pudo salir de Cuba 10 anos despues de su entrada a la Embajada de Peru.

    Cuando se otorga un Salvoconducto, Sr Alzugaray, no se viola descaradamente, ni se mete preso al solicitante, como le sucedio a muchos de los que entraron a la Embajada de Peru, en 1980.
    Un salvoconducto esta protegido tambien por tratados internacionales.

    • hola jose ese caso lo conoci personalmente .el primer secretario de la embajada de italia en la habana renato varreale nos conto de dicho caso.razon para salir con el salvoconducto .razon que yo si no tuve familiares con relaciones me costo el combinado .estando preso robertico robaina me contesto una carta donde me explicaba que cuanto terminara la sancion me dejarian salir del pais .tenia un C-8 en inmigracion era el FIFO que no me dejaba salir

  5. Desconozco ese caso pero le aclaro. El salvoconducto en casos de asilo se da pero para que el asilado salga del país. El gobierno cubano ha dado centenares de salvoconductos para que los asilados salgan. Ponerse aquí a discutir casos aislados sería imposible. No los conozco. Si conozco muchos asilados que recibieron salvoconductos y se fueron del país.

  6. UN POLÍTICO QUE SI SE LE HA PROBADO QUE RECIBIÓ UN SOBORNO, NO SE LE PUEDE LLAMAR “PERSEGUIDO POLÍTICO” , PORQUE NO LO ES. EN TODO CASO UN DELINCUENTE COMÚN.

Deja una respuesta

Carlos Alzugaray Treto
Carlos Alzugaray Treto
Embajador y Profesor Titular retirado, analista internacional independiente y ensayista

Más de este autor

Descubre más desde La Joven Cuba

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo