Presupuesto del Estado: inversiones y otras cifras del pasado para entender el presente

La ejecución del presupuesto del Estado cubano es una preocupación de muchos ciudadanos. Aunque de momento no contamos con toda la data actualizada sino la disponible sobre el tema en la Oficina Nacional de Estadística e Información, una mirada a los últimos años, así como reportes de prensa, pueden ofrecer a nuestros lectores la perspectiva de cómo se ha gastado el dinero público en la última década.

Lo primero que debe aclararse es que las cifras oficiales siempre se dan en pesos cubanos, que es la moneda de curso legal en la Isla, aunque desde los años 90 tanto empresas y organizaciones estatales, como actores domésticos, han operado con divisas o sustitutos «espejo» de estas —como el CUC o la MLC.

La Joven Cuba consultó a varios economistas sobre cómo se registran estas divisas en la estadística del presupuesto y la respuesta, básicamente, es que no hay un registro público sobre la ejecución de la moneda fuerte desagregada, con respecto a la moneda nacional.

Por tanto, se supone —aunque nunca se ha confirmado así por una fuente oficial— que las divisas sean registradas a su conversión oficial para las empresas y organizaciones estales 1 USD/CUC = 1 peso hasta 2021 y 1 USD/CUC = 24 pesos a partir de 2021. Por lo cual, la cifra final incluiría de forma indivisible la moneda nacional + la divisa convertida según la tasa antedicha, vedando de esta forma la posibilidad de saber cuánta divisa se invierte en cada sector.

De forma oficial, encontramos que el presupuesto del Estado suele ejecutarse de manera similar año tras año. Destacan tres sectores de los gastos que durante la última década, reciben especial atención:

• Educación
• Salud pública y asistencia social
• Seguridad social

Aquí, algunos elementos que podemos destacar para una mejor comprensión del fenómeno y que salen directamente del análisis de las visualizaciones. Tenemos en cuenta los Gastos de la Actividad Presupuestada de 2012-2022:

• El gasto en salud pública y asistencia social se da dentro de la misma estadística, cuando ambos renglones no actúan siempre en el mismo ámbito.La seguridad social, por su parte, «protege al trabajador y su familia, ofrece prestaciones monetarias para cubrir riesgos ante las enfermedades, la invalidez total y parcial, la maternidad e, incluso, el fallecimiento del trabajador», según dijera la titular del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feito, en 2021 a la Mesa Redonda. Aunque esta área cuenta desde 2011 con el sector cuentapropista como nueva fuente de tributos para su financiamiento, no se aprecia un impacto significativo en el sector.
• Un momento en que los gastos de Salud Pública y asistencia social se disparan con respecto a años anteriores, es en 2021, lo cual se explica porque se destinaron muchísimos recursos a enfrentar la pandemia de covid19 y mantener a flote al sistema de salud nacional en ese escenario.

Si nos detenemos a mirar los montos de la ejecución del presupuesto, veremos algunos datos que llaman la atención.

• Precisamente los gastos de Seguridad Social son muy similares en la última década, excepto en 2021 y 2022. Aquí ocurrió el aumento de pensiones y otras prestaciones, impulsado por la Tarea Ordenamiento.

• La caída del gasto en salud pública en 2022 tiene entre otros motivos que el año anterior, junto al Ordenamiento, la salud fue altamente priorizada ante la pandemia de covid19. Con la enfermedad controlada, en 2022 ese gasto se redujo y se redistribuyó a otros sectores.
• Un detalle que llama muchísimo la atención es cómo se disparó el gasto en Cultura y Deporte para 2021. Algunos motivos de este boom pueden encontrarse tanto en el Ordenamiento como en la realización de Olimpiadas ese año en Japón.
• Aunque la Ciencia e Innovación se promueve como un sector de alta importancia para el desarrollo del país, el gasto que se ejecutó durante 2021 es ínfimo frente a otros como Administración Pública. Este último aumentó con creces ese año, situándose por encima de Seguridad Social y muy similar a Educación. Luego del éxito de las vacunas cubanas, el presupuesto del sector de Ciencia e Innovación cayó casi a la mitad al año siguiente.

Ahora pasemos a las inversiones. Tomemos en cuenta que no todas las inversiones parten del presupuesto del Estado, aunque ciertamente el interés de los actores inversionistas está muy centrado en inmuebles, presumiblemente construcción de hoteles. El tema de si todo el dinero debe verse de forma centralizada, queda en manos de especialistas y, de momento, ese análisis no centrará este artículo.

Analicemos algunas señales de esta gráfica:

• Lo primero que salta a la vista es la gran desigualdad del acápite de Servicio Empresarial, Actividades Inmobiliarias y de Alquiler, frente al resto de los datos seleccionados (se puede descargar toda la data desde el vínculo en la gráfica). Luego, el sector de Hoteles y restaurantes ocupa el segundo lugar. Evidentemente, la economía se construye sobre el turismo, como hace tantos años en Cuba. Esta apuesta sigue siendo arriesgada en medio de las sanciones norteamericanas y la elección por parte de muchos mercados de opciones más atractivas. Asimismo, deja ver una visión reduccionista del turismo.
• Al igual que en la ejecución del presupuesto, en el volumen de inversiones, Ciencia e Innovación sigue como la Cenicienta. Alabada por los actores del Estado como un logro, pero relegada a puestos de desventaja cuando de inyectarle capital se trata.
• Cultura y Deporte, Educación y Seguridad Social se muestran muy parejos, aunque no alcanzan el interés de los inversores del mismo modo que en el desglose del presupuesto estatal.
• Aunque en 2021 subió el monto en muchos sectores por la Tarea Ordenamiento, la subida de Servicio Empresarial, Actividades Inmobiliarias y de Alquiler es más pronunciada que el resto. Un año donde se «reordenó» la economía y se vivía bajo la amenaza de la covid-19, las inversiones de este sector se dispararon.

Con este espacio, buscamos facilitar a nuestras audiencias elementos que sirvan como punto de partida para análisis críticos, y para visibilizar patrones y tendencias en los datos disponibles sobre Cuba, en esta ocasión enfocado en el sector de la economía.