Dune parecía condenada a convertirse en uno de esos clásicos literarios de intensidad y esencia imposibles de llevar al cine. Y entonces llega Denis Villeneuve.
¿Cuál es la situación objetiva hoy del ICAIC? El edificio blanco por un lado, una buena parte de los cineastas por otro. Una presidencia que parece más interesada en pequeños golpes de efecto que en transformar lo que debe ser transformado. Una Ley de Cine largo tiempo reclamada y aún incierta. Una Asamblea tal vez minada de radicalismos pero que hace gala de espíritu democrático, una paciencia admirable y un espléndido civismo.
Pierre Richard y Gene Wilder: ambos comediantes, interpretando personajes tiernos y vulnerables. Los dos contaron, en algunos de sus trabajos más logrados, con una contrafigura de calibre; además de actuar, los dos dirigieron alguna vez.